Evidencia científica de la Aromaterapia frente a virus y bacterias
Aceite esencial de Limón Amarillo (citrus limonum), corteza.
Famoso por su capacidad purificante como «limpiador del aire», antibacteriano y antivírico. Incluso los virus más pequeños no son capaces de resistirlo. Los cientificos franceses Morel y Rochaix demostraron, hace décadas, que las partículas diluidas de Aceite Esencial de Limón son capaces de neutralizar el Meningococcu (Meningitis – infección de la sangre) en 15 minutos. La bacteria Ebert que ocasiona el Tifus en apenas una hora. El Pneumococcus (que genera la neumonía) en 1 – 3 horas. El Staphylococcus aureus (afecciones en la piel e infecciones respiratorias, intoxicaciones alimentarias) en 2 horas. El hemolytic Streptococci (descompone los glóbulos rojos). Es muy eficaz utilizado en un micro-difusor en casa o en la oficina para la difusión en seco y sin calor. En los centros sanitarios su dilución debería ser obligatoria.
Aceite Esencial de Cilantro o Coriandro (coriandrum sativum), semilla.
Es ideal para combatir los virus que afectan a la llamada zona O.R.L. (oido, nariz, garganta) o al tracto urinario. El aceite esencial extraido de las semillas del cilantro o coriandro ha mostrado resultados drásticos contra todas las principales bacterias transmitidas por los alimentos, como las distintas formas patógenas de Escherichia coli y muchas otras. El alto contenido en alcoholes monoterpénicos y monoterpenos recomienda el uso del aceite esencial como agente inmunomodulador, analgésico y antiinflamatorio en reumatología y además como agente antibacteriano y antiviral. Su aplicación se puede hacer por masaje diluido en una base de aceite vegetal y, además, vía oral mezclado con miel (recuerda que puedes ponerte en contacto con nuestro departamento de consulta si tienes dudas a este respecto).
Aceite Esencial de Hisopo Decumbens o de Montaña (hyssopus decumbens), planta en flor.
Ha demostrado ser muy eficaz en el tratamiento de la gripe, bronquitis e infeccions que afectan a la llamada zona O.R.L. (oido, nariz, garganta). Es un poderoso agente antiviral y anticatarral, expectorante y notablemente antiasmático. También tiene una acción vigorizante y estimulante en el sistema nervioso.
Aceite Esencial de Mejorana dulce (origanum majorana), planta.
Eficaz contra los distintos virus que afectan al campo de las O.R.L. (infecciones que afectan a la zona de oido, nariz, garganta), y también para las infecciones virales de la piel, como herpes, varicela o psoriasis. Este aceite esencial ocupa un lugar destacado en caso de inmunodeficiencias de todo tipo. Sus efectos antiinfecciosos refuerzan su uso en difusión en el caso de epidemia, fatiga general o infecciones virales y bacterianas.
Aceite Esencial de Ravintsara (cinnamomum camphora), hojas.
El quimiotipo 1,8 cineol es un potente agente antiviral y anti-bacteriano que trabaja eficazmente en caso de gripe, infecciones bronquiales, problemas viricos en la piel, infecciones del tipo O.R.L. (afecciones en zona de oido, nariz, garganta). El aceite esencial de ravintsara es un antiviral y microbicida excepcional, inmunoestimulante y una gran ayuda para el sistema cardiorrespiratorio debido a su acción anticatarral y expectorante. Limpia el tracto respiratorio y es un buen tónico, neurotónico y un potente energizante.
Aceite Esencial de Árbol del té (melaleuca alternifolia), hojas.
Famoso por sus propiedades antisépticas y sus potentes efectos antiinfecciosos en muchos niveles incluido el tracto respiratorio. La acción protectora de este desinfectante natural contra el virus de la gripe capturado en las superficies de fibra en hospitales, mostró eficaces propiedades antivirales inactivando los microorganismos capturados en 5-10 minutos desde que entró en contacto con estos. La mejor manera de utilización es usarlo diluido en el ambiente y aplicado sobre las superficientes como limpiador antiséptico.
Aceite Esencial de Cardamomo (elettaria cardamomum), semillas.
El aceite esencial de cardamomo es en primer lugar un muy eficicaz aceite esencial digestivo, carminativo (ayuda a expulsar los gases) y además un gran antiespasmódico. Pero además, tiene un grado muy alto de acción en el sistema respiratorio gracias al compuesto respiratorio eucaliptol (1,8-cineol), por lo que muestra una buena acción anticatarral y una poderosa acción expectorante. El aceite esencial de cardamomo, en general, es rico en ingredientes antiinfecciosos. Investigaciones cientificas demostraron que el aceite esencial mostró actividad antimicrobiana contra casi todos los microorganismos probados. Otros estudios concluyen que este aceite esencial podría ser un componente importante en los nuevos fármacos antimicrobianos. Las investigaciones afirmaron que la actividad antimicrobiana del aceite esencial de cardamomo es el resultado de ser capaz de dañar la membrana celular de ciertas bacterias inhibiendo el «quorum sensing» o comunicación celula a célula en el caso de gérmenes patógenos.
Aceite Esencial de Eucalipto radiado (eucalyptus radiata), hojas.
Potente expectorante y limpiador del sistema respiratorio. Nuestra recomendación es que lo utilices en caso de rinitis, sinusitis, otitis (con acciones similares a las del aceite esencial de árbol del té). El aceite esencial de eucalipto radiado tiene un largo historial como agente protector contra muchas bacterias, incluyendo la de tuberculosis y MRSA, virus y hongos (incluida la cándida). Es un gran inmunoestimulante, antiinflamatorio, antioxidante, analgesico y antiespasmódico. Ha dado muy buenos resultados para problemas respiratorios como bronquitis, asma y enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). La mejor de utilizarlo es mediante vahos, dilución en el ambiente con un difusor de aceites esenciales o vía oral (esta última siguiendo las pautas de un médico, profesional aromterapeuta, naturópata o farmacéutico con formación en aromatología).
Aceite Esencial de Lemongrass (cymbopogon citratus), hojas.
El aceite esencial de lemongrass es un potente antiviral y antibacteriano. Este aceite reduce a la bacteria Escherichia coli (presente en la comida) hasta niveles practicamente indetectables. La aparición de Escherichia coli O157:H7, un patógeno alimentario principal presente en la carne cruda, se inactiva cocinando a altas temperaturas pero que a su vez implica la formación de aminas heterocíclicas (HCAs) causantes del cáncer. El aceite de lemongrass es una de las mejores soluciones para neutralizar los patógenos alimentarios. También muestra actividad antimicrobiana sobresaliente contra Bacillus cereus, Staphylococcus epidermidis y Streptococcus pneumoniae. El aceite también demostró efectos inhibitorios contra el Bacillus subtilis y los hongos.
Aceite Esencial de Laurel noble (laurus nobilis), hojas.
Las pruebas han validado su reputación de los efectos ante infecciones ocasionadas en la zona de oido, nariz y garganta (O.R.L.), así como desórdenes en el sistema respiratorio. Se trata de un aceite esencial con propiedades antiinfecciosas, espectorantes y mucolíticas, que lo hacen ser una de las mejores opciones en caso de virus de cualquier tipo que afecte al sistema respiratorio. Los vahos y la difusión atmosférica mediante micro-difusores ha mostrado una eficacia muy alta como germicida de patógenos diluidos en el ambiente, en particular aquellos que generan mucosidad, bronquitis, candidiasis, flema y sinusitis. El aceite esencial de laurel es como la energía vigorizante que podemos utilizar ante distintos tipos de enfermedades degenerativas. Sus propiedades anti-víricas han sido objetivo de investigaciones muy bien documentadas por ejemplo, los estudios realizados por Monica R. Loizzo, de la Facultad de Farmacia de Calabria en Italia en los que demostró la actividad in vitro del aceite esencial de laurel ante el virus SARS-COV responsable de la epidemia de SARS en el 2003.
Aceite Esencial de Mirto (myrtus communis), hojas.
De entre todos los aceites esenciales, el de mirto es sobre todos ellos el que resulta de mayor ayuda y eficacia ante casos en los que es necesario el efecto expectorante y mucolítico. Entre su composición bioquímica encontramos componentes sumamante útiles hoy por hoy como el 1,8-cineol (Eucalyptol). Este componente en particlar tiene un acción muy potente a la hora de facilitar la eliminación del moco depositado en las membranas. Este mismo componente bioquímico suaviza la inflamción de todo el sistema respiratorio. Si tuviesemos que ponerle un calificativo podríamos llamarle «el respirador», ya que es definitivamente un luchador en caso de problemas bronquiales sean del tipo que sean. Tambien podemos darle el calificativo de «descongestivo». La creciente preocupación de la medicina alopática ante la resistencia de determinadas bacterias a los antibioticos convencionales se ha convertido en un problema mundial. Las pruebas han demostrado que el aceite esencial de mirto tiene un potencial altisimo ante la destrucción de al menos una docena de patógenos responsables de diferentes tipos de infección común.
Aceite esencial de Romero Cineol (rosmarinus officinalis), planta en flor.
Dentro de los tipos bioquímicos que tenemos disponibles de Romero, el de romero cineol resulta de gran ayuda ante infecciones pulmonares del tipo bronquitis, tos y todas las patologías relacionadas con las infecciones que afectan a la zona oido, garganta y nariz (O.R.L.), incluyendo tambien el resto del tracto respiratorio al que libera de infecciones microbianas y cogestión. Es un potente bactericida ante staphylococcus aureus, white staphylococcus o streptococcus, entre otros.
Aceite esencial de Niaouli Viridiflorol (melaleuca quinquenervia viridiflora), hojas.
Dentro de los distintos quimiotipos de niaouli encontramos el de viridiflorol para el tratamiento anti-viral. Es un aceite esencial anticarral muy eficaz ante esta pandemia con propiedades espectorantes, anticatarrales y mucolíticas. El niaouli es un anti-viral muy potente, un anti-bacteriano, un agente aromático fundamental en caso de Staphylococcus aureus como han demostrado las investigaciones. El aceite esencial de niaouli es muy efectivo en caso de enfermedades infecciosas en concreto aquellas originadas por patógenos intracelulares. El aceite esencial de niaouli es un antígeno, es decir, potencia la inmunidad celular (un antígeno es una sustancia que al introducirse en el organismo induce en este una respuesta inmunitaria, provocando la formación de anticuerpos).